Un ambiente tradicionalmente masculino, con pocas comodidades y calendarios con desnudos femeninos. Ese podría asemejarse en cierto modo al concepto que hasta hace poco teníamos de un taller mecánico. Pero parece que podría cambiar pronto, o al menos es lo que pretende Enrique Igarzábal.
En vistas de que las mujeres no solían acudir a los talleres, y que cuando lo hacían terminaban por pagar más que los hombres, se decidió a crear un nuevo tipo de taller, un "taller amigable con las conductoras". Para conseguirlo abrió Ask Betty en Montevideo (Uruguay).
Un taller donde no sólo se ofrecen servicios ordinarios de grúa y reparación de vehículos, como amortiguación y lavado, sino que va mucho más allá. Con el violeta como color dominante, Ask Betty ofrece servicio de peluquería, un rincón infantil, conexión wi-fi y unos baños impolutos y con mueble para poder cambiar a los bebés. Todo para conseguir que los talleres dejen de ser lugares inhóspitos para las mujeres.
Enrique se puso como objetivo que las mujeres "acudan a un lugar de confianza en el que se sientan cómodas a precios competitivos", además de que no interfiera en su vida cotidiana. Por ello pueden acudir con sus hijos, seguir trabajando o incluso cortarse el pelo. Y sin salir del taller.
Aunque el negocio está claramente orientado a la clientela femenina, también son muchos los hombres que deciden acudir con su coche, en busca de un ambiente más tranquilo. Además, todo lo tocante a la mecánica se explica con un vocabulario adecuado para la gente de a pie, que por lo general cuenta con un conocimiento más exiguo en mecánica.
La mecánicos por el momento son todos hombres, aunque Ask Betty ya cuenta con dos mujeres aprendices en sus filas, que buscan romper con el cliché y el entorno masculino propio de los talleres.
Jessica Julián, peluquera de Ask Betty, asegura que su entorno de trabajo es "una propuesta innovadora", y acorde con el elevado número de mujeres conductoras en Uruguay. También ha afirmado que antes "no iba al taller porque es un entorno machista".
Por el momento, Ask Betty y su nuevo concepto de taller ya ha conseguido que varios talleres de Montevideo reaccionaran bajando los precios, aunque sin un cambio en su filosofía masculina, tal y como critica Enrique Igarzábar.
Fuente: elmundo.es